Entrada sobre los blogs que leo.

Es lo que quiero hacer algún día, je. Hay pocos que frecuento bien bien pero sí tengo favoritos, me emociona que escriban, los leo en la noche y me hacen feliz. Sí tengo alma, no soy tan amargada ;) Esta semana me dio por picarle a las ligas de ellos, algo que casi nunca hago. Está padre, a ver qué encuentro. Hay días en que tengo muchas ganas de hablar y escribo/comento MUCHO de bitácora en bitácora, de pronto me extiendo un chingo y ya parece post, no comment. Pero luego hago berrinche y ya no quiero saber nada ni de mi propio diario electrónicou. Mmm, hasta me llevo mis comentarios, :S Mala bloggera, mal. Dizque por ser míos, uy!

La búsqueda de hoy no arrojó nada bueno. Me chocan los que empiezan disculpándose o justificando los motivos que los orillaron (jo!) a tener una cosa de estas. ¿Quién se saca intros tan chafas? Chale. También digo ash a los que *no creen como todos los demás que tengan algo importante que comunicar a la humanidad* o sea los que escriben sin pretender (ew!), los *sólo escribo para mí, no me gusta que me lean*, ahhh y así. Jejeje, pero bueno ya me estoy peleando y es muy noche.

Oh!, desde el viernes pasado mi vida laboral se ha puesto muy hecho a mano. Ai jeit artesanías ò_Ó más cuando las hago yo, jo jo jo. *Elaborado en el pueblo de Polanco por las cálidas manos de Alejandra Barrera*, debería decir una nota colgada de las invitaciones que estoy (si Dios quiere [ojalá que sí]) a punto de terminar.