Por cierto...

hoy me corté un dedo mientras manufacturaba un algo único en el mundo ahí en la oficina y me di cuenta de lo mucho que me paniquea ver MI sangre correr por ahí. Uyyyy qué miedo. Fue una lastimadura menor, no sentí ardor hasta verla pero luego me amarré cinta mágica y papel para no mirar, ni estar nerviosa. Mi remedio todo diseñador, :P

La semana pasada Luis pasó escurriendo frente a mí n_n, él sí se hirió muy feo. Je, ahora todo se oye súper peligroso. Goteaba y dejó un caminito hasta el baño. Como una vez que viajaba en barco de Mazatlán a La Paz hace muchos años, como 19 más o menos, miré a un hombre ensangrentado salir de su camarote gritando, el lavabo se vino abajo y se partió sobre su pie. Metaaal. Yo temí. Las paredes eran azul pastel, la música ambiente venía del bar. Era algo muy sabrosón.

En las pelis me encantan las tripas pero en vivo ya veo que no tanto :'( SNIF.